El arquero de Newell’s Franco Herrera tuvo una actuación destacada ante la Academia y palpitó el clásico ante Rosario Central. Cómo fue su paso por el básquet hasta desembarcar en el fútbol.
A los cuatro años quiso ser jugador de básquet. A los seis, le empezó a tirar también el fútbol. Y, a los 18, Franco Herrera será nada menos que el arquero de Newell’s en el Gigante de Arroyito. En el 0-0 ante Racing, el pibe de Santiago del Estero cumplió con creces su primer partido como titular de la Lepra, haciendo frente a la lesión de Ramiro Macagno.
Tuvo cuatro tapadas, dos dentro del área, que le garantizaron la cima del campeonato. Ahora, deberá sostenerla en el clásico frente a Rosario Central. “Estaba muy tranquilo, con la confianza de mis compañeros, que me hablaron durante la semana. Estoy contento, aprovechando la oportunidad”, afirmó Herrera, luego de la igualdad.
“Jugué al básquet en San Lorenzo de Tostado. Dos días hacía fútbol y tres básquet. Iba variando hasta que se dio la posibilidad de Newell’s”, había comentado el nacido en Bandera. En abril, tuvo su debut en Primera, en un 1-0 vs. Patronato, ¡siendo el cuarto arquero! Y, frente a la Academia, estuvo en el arco desde el inicio. “Sanguinetti me dijo que esté tranquilo, que haga las cosas simples. Me dio confianza, tanto él como el CT. Y, mis compañeros, mucho más”, contó.
El siguiente paso en la carrera de Herrera será, nada menos, que hacerle frente a 45.000 canallas, el jueves. “Soñé un montón con atajar en un clásico. Se vive de una manera distinta y el hincha te hace saber que es un partido aparte. Vamos a seguir trabajando para encararlo de la mejor manera, con tranquilidad”, expresó. Todavía no recibió goles en dos partidos y deberá volver a mostrar la seguridad que tuvo ante a Racing si quiere llevarse el partido que mueve a todo Rosario.
Fuente: www.ole.com.ar